Estamos viviendo algo histórico, una situación de la que hablaremos durante mucho tiempo y contaremos a nuestros nietos. Una pandemia que ha puesto en cuarentena a buena parte de la población mundial. Que tendrá un impacto económico que ahora mismo es difícil de cuantificar.
Sin perder de vista las consecuencias sociales, las víctimas y sus familiares y reconociendo la necesidad de determinados estamentos de nuestro sistema productivo (sanidad, retail, atención a los mayores…) debemos poner en valor la digitalización de nuestro modo de vida.
Nos hemos encerrado en casa, sí, pero lejos de estar solos, sin hacer nada, y viendo los días pasar por la ventana, somos capaces de mantenernos informados. A través de fuentes fiables y oficiales y también con expertos que tiene mucho que aportar. Nos ayudan a sobrellevar esta situación, sabiendo que estamos haciendo lo mejor y contribuyendo a que la situación mejore cuanto antes.
El poder de las redes sociales en tiempos de crisis
Los influencers digitales cobran también peso ayudando a difundir mensajes necesarios, de calado. Son un canal perfecto para conseguir que lleguen a la sociedad y poder salir de esta situación cuanto antes. Según Socialité, el propio Ministerio de Sanidad acudió a Dulceida para que le ayudará a pedir a la población que se quede en casa.
Otro punto relevante es la unión que se produce entre los ciudadanos en las redes sociales. La capacidad para generar movimientos positivos y de concienciación, es un gran valor que tenemos a día de hoy gracias a las redes sociales. #TodoVaASalirBien, #YoMeQuedoEnCasa o el agradecimiento en forma de aplauso desde nuestros balcones hacia aquellos que se juegan su vida y la de sus familias para que nosotros estemos bien (personal sanitario) y no quedemos desabastecidos (canal retail), son claros ejemplos de lo útiles que están resultando las redes sociales. Y esto ayuda en lo racional, hacer lo que las autoridades nos están pidiendo y en lo emocional, estar unidos, no sentirnos solos y ver la luz al final del túnel.
¿Qué están haciendo algunas marcas con su comunicación durante esta crisis sanitaria?
Vemos cómo las marcas de aquellos servicios que podemos seguir disfrutando desde casa dan un paso hacia adelante ofreciendo sin coste televisión para los más pequeños, suscripciones gratuitas a revistas, cursos online o charlas,… Otros tratan de aportar su granito de arena, como los expertos que nos enseñan a hacer ejercicio en casa, escritores de best seller con lecturas improvisadas al otro lado de la pantalla o directos musicales de lo más íntimos, con nuestros cantantes favoritos sentados en su sofá.
No me digáis que las redes sociales no son un elemento clave para salir adelante de una situación como esta, en el menor tiempo posible y sobrellevarlo de la mejor manera posible. Ahora bien, ¿podemos hacerlo al menor con las menores secuelas posibles? Si ahora no podemos vender, sí podemos sembrar para cuando todo esto pase y estar al lado de los consumidores a pesar de que nos van a comprar. Es momento para construir y estrechar la relación con los clientes.
¿Cómo trabajar la comunicación de una marca y sus productos para minimizar las pérdidas en ventas en tiempos de pandemia?
Una vez afrontada la situación en la que nos encontramos, poco a poco veremos cómo volvemos a nuestro día a día, un tanto especial, con nuevas rutinas, más digitales que nunca. Más televisión, sobre todo a demanda, más YouTube, más medios digitales en general. Quedadas por WhatsApp, juegos online, más interacciones con nuestros influencers de cabecera, … Los primeros datos empiezan a aflorar. Un incremento de un 50% de uso del móvil, + de 230K de vídeos en streaming activos, un 40% de aumento en el consumo de internet…. El confinamiento en casa conlleva, sin duda, un mayor consumo de contenido en plataformas digitales.
También son tiempos para Inbound Marketing
Pues bien, ya que las ventas van a disminuir y los productos no van a estar a disposición de los clientes, es el momento de centrarse en la parte superior del funnel de conversión y el servicio postventa.
En el primero, para no perder posiciones cuando se reactive el consumo y se acuerden de aquellas marcas que estuvieron ahí, apoyando, sin dejarles solos porque no les iban a comprar.
Y en las fase postfunnel, porque serán muchos los clientes que hayan adquirido un producto o contratado un servicio y ahora son un mar de dudas. No sabrán si les llegará a casa o no, si lo podrán devolver algún día, qué pasa si se acaba el plazo para poder disfrutarlo en caso de bonos regalo… Un servicio post venta excelente durante la crisis, puede ser la mejor carta de presentación y conseguir que las ventas no decaigan o se recuperen ágilmente una vez todo esto pase. Llévalos a lo canales digitales, mensajes directos de Instagram, Messenger en Facebook, WhatsApp, son la alternativa que seguramente ya estaban demandando. Prepara unas buenas FAQ´s, con respuestas claras y transparentes que serán muy útiles en momentos de incertidumbre como este.
En definitiva, más que nunca es el momento de pensar en digital o, mejor dicho, de repensar en digital, darle una vuelta a todo ofrecer soluciones que nacerán en momentos de crisis pero seguro vendrán para quedarse.